29 de julio de 2010

Lima y al sur de Perú

Ya son 10 días de la caída de Jorge por las dunas, días en los que hemos recibido varias llamadas, mensajes y preguntas en el muro de facebook, no es más si no darle las gracias a todos en Colombia, Venezuela, Ecuador y Perú, por cada palabra de ánimo para seguir adelante con nuestro sueño. Después de el paso de los días, de un poco de actividad física, los medicamentos, su médica particular y siempre a su lado, las llamadas y mensajes de aliento, podemos decir que ya falta poco para decir “prueba superada”, son cosas que pasan en casa y fuera de ella, y para las que hay que estar preparado, creemos nos fue bastante bien ya que la mayoría de lesiones fueron menores y segundo porque contamos con atención rápida y de buenos profesionales peruanos y porque teníamos un seguro internacional. Ahora nos dedicaremos a conocer la hermosa capital.

Con el recién reparado motor, hay que darle un largo recorrido o permanecerlo prendido por unas 24 horas, hoy en la tarde decidimos iniciar este proceso para poder hacer la revisión final y continuar rumbo a chile. Paramos cerca a la playa y mientras almorzábamos y tomábamos un rico café la dejamos prendida, ya vamos 5 horas adelantadas solo nos faltan 19. De regreso, me toca conducir en hora pico "OH DIOS MIO" mientras vamos por la vía costa verde, el carro empieza a corcovear un poco... sale humo y se apaga, prende nuevamente, después de recibir varios insultos, lunita prende y arranca... pobre lunita si tuviera mamá que mal se habría sentido por esos feos insultos. con un poco de temor, con muchas bocinas sonando por doquier y taxistas con caras tipo perrito sharpei, arrancamos nuevamente, mientras el motor va estabilizando, creemos que fue un mugre en el carburador, esperamos que lo sea, y como dicen por acá esperamos que el motor no se haya "MALOGRADO".
Los dejamos con esta imagen de un hermoso atardecer desde las playas de barranco - LIMA.

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LIMA, fundada por Francisco Pizarro el 18 de enero de 1535, capital hermosa e interesante, única en Suramérica con el mar como testigo de miles de hazañas y hermosas puestas de sol, alguna vez amurallada, azotada a través de la historia por destructores terremotos, Con hermosos y variados lugares para conocer, deliciosa comida con interminables opciones para escoger en el menú, restaurantes en la playa, en el centro, en todo lado, comida criolla, de mar, chifa (comida china/peruana), italiana, y más. Turistas que transitan tranquilamente por Miraflores, barranco y centro histórico. LIMA nos encanta ser testigos de tu belleza.


No podía faltar el famosísimo paseo por la plaza de armas, catalogada como una de las más bellas de América. Alberga 3 edificios importantes de la época colonial, la catedral, el palacio de virreyes hoy casa de gobierno y la municipalidad, en el centro de la plaza de armas está adornado por una pileta aun conservada del siglo XVII, Aprovechamos para ver el cambio de guardia que se hace todos los días detrás de rejas del palacio presidencial a las 11:45 am el dia de hoy bajo un sol y calor propio del verano que muestra todo su esplendor, los soldados de la guardia presidencial acompañados de la banda militar, danzan al ritmo de sus pasos militares con precisión y elegancia, y entregan después de una larga estancia en la puerta principal del palacio presidencial el cuidado del primer mandatario. A sus alrededores, restaurantes que ofrencen cientos de variedades de comida, el famoso menú del dia o a la carta, Sanguches, como los llaman por aca, tacu tacu, pescado en platos diversos, acompañados chihcha morada y para cerrar con broche de oro un mate de coca y las famosas ventas de comida callejera que no podían faltar, anticucherias (Brocheta de corazón de res asada), arroz con leche, arroz de chanca (cuchuco), picarones, mazamorra morada y mas. Después de disfrutar todas estas delicias de la culinaria Peruana, vamos a dar un paseo en el bus turístico mirabus, con un recorrido en la noche por el centro histórico donde observamos como en todo centro histórico mas iglesias que otra cosa, con una linda arquitectura y conservación, pero con muy pocos creyentes en su interior. Para terminar nos desplazamos hasta el parque de la muralla, donde aun queda el vestigio de lo que era la muralla que protegía a la cuidad de lima de piratas, corsarios y ataque de los enemigos de la corona española. Realmente solo son unas pocas paredes conservadas de lo que fue alguna vez muralla, en todo el tramo izquierdo del rio Rímac y por ultimo vamos hacia el barrio chino a unas 3 cuadras de la plaza de armas, con gran movimiento comercial, mucho comercio informal y restaurantes chifa. Todos los letreros hasta los de los bancos conocidos con letras chinas. El museo de la nación, aunque se encontraba en restauración, tenia una exposición de cerámicas y tejidos de la cultura peruana a través del tiempo y subdividida por regiones, además una exposición de fotografía bastante fuerte y conmovedora de la época de la violencia en Perú, fotos de gran tamaño de diferentes situaciones que mostraban el dolor y la tristeza del pueblo peruano en aquellos tiempos, en ese momento recordamos el sufrimiento de nuestro país por todos los problemas del narcotráfico y las fuerzas armadas ilegales, tal vez los peruanos entiendan lo que nosotros sentimos al haber pasado por una dura situación.

Recibimos la invitación de Carlos, quien nos quiere dar a conocer Lima nocturna, vamos a darnos una buena comilona como lo hacen siempre en perú y después vamos hacia Barranco, lugar de miles de historias e inspirador de artistas, el Barranco del “viejo puente, del río y la alameda” como cantaba chabuca granda, colindando varios restaurantes que ofrecen variada comida y una hermosa vista a la playa. Artesanos y cantantes haciéndole a la gente mas amena la caminata. Luego vamos mas al sur hacia chorillos por toda la via costa verde que colinda con el sonido del mar y activa nuestro olfato con el fuerte olor salitre.


El dia de los Enamorados, Jose y su esposa Silvia nos invitan a dar una vuelta por la cuidad, vamos a un famosísimo lugar con mas de 50 años de antigüedad en Barranco, a comer Butifarras (que es un sándwich con jamon del país y el toque picante especial típico de los peruanos) el jamon con el que se prepara es hecho y curado en casa. Al final de la noche nos acercamos a una reserva natural en San Isidro, dentro del área urbana, son muchas hectáreas con Olivos centenarios “parque el Olivar”, en algunos de los arboles de gran tronco y con aspecto de árbol fuerte pero viejo, sobresalen aun algunas aceitunas. Un lugar lindo y tranquilo para descansar de ese constante bullicio y del sonido de las bocinas de los autos de Lima, pero a la vez un pequeño pulmón en medio del medio ambiente desértico y la polución de la capital.

Con una percepción global de Lima, arreglamos nuestra Kombi y salimos rumbo al sur, con el carro máximo a 2000 rpm a 60 km/h, hasta paracas, fueron casi 7 horas para llegar hasta este lugar a esa velocidad. Pasamos por Pisco, siguiendo al GPS, en vez de seguir por la panamericana, y al apagar el carro no vuelve a prender, lo empujamos y prende, ahora le salió otra pata al gato, al llegar a Ica, hay que hacer una revisión. Llegando a paracas después de las 7 pm, se acercan varias personas a ofrecernos tours a las isla ballestas, separamos nuestro cupo. Paracas un pequeño pueblo frente al océano, pueblo de pescadores y turismo. Nos acercamos a la policía quien nos da permiso para acampar frente al malecón en el muelle frente al mar. Sobre el amplio malecón que fue construido después del terremoto de hace 2 años, antes calle vehicular, turistas extranjeros recorriendo y buscando un lugar para comer entre todos los restaurantes y la gran variedad del menú, y los sitios de artesanías que ofrecen un collar, una pulsera o algún animal de mar muerto o el recuerdo para llevarle a la familia que dice PARACAS-PERU. Una noche un poco incomoda por el constante ajetreo y movimiento en el muelle, el taxista que llega escuchando su tecnocumbia a todo volumen, el pescador que llego con su faena de la noche y la madrugada. Ya en la mañana siguiente vamos hacia las islas ballestas a unos 30 minutos en bote de 2 grandes motores desde el muelle.


Primero nos acercamos a la escultura del candelabro o del cactus, cada cual lo deja a su imaginación. Se encuentra en un islote en el camino a las islas ballestas, se dice que esta escultura puede pertenecer a la cultura paracas y que por las condiciones del clima seco “no lluvia” y el viento que pasa solo por la parte posterior del islote, no lo borra. También se dice que puede ser de la época de la conquista y que este servía como indicación o señalización de llegada a este lugar, la ultima explicación como en muchas ocasiones producto de los extraterrestres.
Al fondo se ve un conjunto de islas rocosas, todas blancas en su parte superior por los tal vez millones de aves que dejan ahí el guano. El guano se extrae cada 5 años aproximadamente de la isla cuando ya tiene un espesor de 35 cms y sirve como abono orgánico de gran solicitud internacional. Al acercarnos a la isla vemos millones de pájaros, y lobos marinos danzando en el agua, también los pingüinos de humbolt, los cuales hay que buscar con mucha atención dado su diminuto tamaño. Se forman algunas playas en las islas que alberga tal vez miles de leones marinos y por la fecha están en época de apareamiento y nacimiento de sus crias. Es hermoso este lugar, todos los lobitos bebes, lloran a sus madres para que les den alimento que han ido a buscar mar adentro.


De regreso de pronto empieza una estampida aves, salen todas, es la hora de buscar comida, vuelan y vuelan todas en la misma dirección, el cielo se ve ennegrecido, y cae una lluvia de guano en la cabeza de los turistas, es inevitable. La lancha corre al paso de todas ellas, que buscan como salir de nuestro camino, es un espectáculo maravilloso, mientras los delfines saltan contentos al saber que ahí estamos nosotros los humanos.

Al llegar empujamos el carro con ayuda de la gente para poderlo prender, y salimos rumbo a Ica. Al llegar nos comunicamos con Jimmy, presidente del Club Cave de Ica, quien nos ubica el eléctrico y el mecánico para en la mañana siguiente con la Kombi friecita, calibrar válvulas después de la reparación del motor. La comida típica de Ica, los pallares, una especie de menestra parecida a las habas, pero más pequeñas. En puré, en picante, como aquí en Perú de todas las maneras habidas, la probamos, ricas, pero no nuestras favoritas, nos quedamos con los mariscos y el ceviche.

En la noche vamos a la reunión del club de Ica al lado del mal de sol, compartimos y contamos historias con los miembros del recién conformado club, y en caravana nos acompañan hasta el hotel donde íbamos a descansar. Esta es la segunda vez que los vemos desde la vez del percance en las dunas de huacachina, y nuevamente les damos las gracias por el trato tan especial y las atenciones. En la mañana se calibran válvulas y se cambia el aceite por recomendación del mecánico que reparo el motor en Lima y salimos rumbo a Tacna.

Primera parada en Nazca sobre la panamericana, desde donde los que no pueden ver las líneas desde el aire, la ve desde una estructura a unos cuantos escalones de altura.

Al prender la Kombi, nuevamente pegado el motor de arranque y a empujar. La panamericana se convierte en vía costera y muestra una cara más amable y menos monótona del desierto. La dirección presentaba un juego bastante grande y de pronto empieza a sonar un traquido sutil que se va intensificando, preocupados llamamos a varias personas que nos dicen que debe ser el tornillo sin fin de la caja de la dirección, vamos conduciendo con mucha precaución sobre todo al virar la dirección hacia la izquierda. Después de cientos de kilómetros de desierto y traquidos de la dirección, llegamos a Ático, un pueblito polvoriento de lo cual nos interesaba abastecernos de combustible y descansar. Salimos temprano vía Tacna, Al mirar durante el recorrido la presión del aceite vemos que está en 30PSI, apagamos el carro, esperamos un rato, no entendemos que está pasando, pero no habrían razones para que el motor calentara, lo llevamos a menos de 80 km/h y sin revolucionarlo demasiado y esta recién reparado. Arrancamos nuevamente y la temperatura se mantiene estable, con el desierto a nuestro alrededor, las dunas, las piedras, la arena que cubre la carretera y la borra de nuestras vistas y que con ayuda de maquinaria se vuelve a asomar y el mar que suena al romper las olas.

llegamos a un pueblecito cerca al peaje de Tacna donde nos detenemos al darnos cuenta que las luces no prenden alto y ya está cayendo la noche. Nos quedamos en la estación de servicio y dormimos con mucho frio. Al madrugar y revisar el motor, las válvulas están cerradas, se calibran y en el trayecto, no vuelve a calentar el motor, eso sí pendientes siempre de las revoluciones del motor y la presión de aceite.


Durante el camino vemos varios viajeros, unos en moto, unos en casas rodantes, pero siempre contentos por encontrar a otro en la misma, las bocinas de ambos suenan y se intercambia un saludo con la sacudida enérgica de las manos que salen de la ventana del carro o del eje central de la moto y una sonrisa, al paso de tortuga hasta los camiones con carga nos adelantan. Llegamos a Tacna y con varios problemas, hay que empujar el carro para prenderlo, las luces no encienden, el motor se estaba calentando y la dirección traquéa. Vamos nuevamente al eléctrico que va de aquí a allá entre dos talleres y arregla en altas horas de la noche el motor de arranque, el buje que se había cambiado en Ica había quedado mal puesto al parecer y con las luces había un problema eléctrico y había que cambiar algunas cosas, habían cables pegados y quemados. Pero este trabajo lo hacía en unas 3 horas y era sábado 9pm. Nos toco esperar hasta el lunes sin mucho que hacer. El lunes muy tempranito nos asomamos en el taller eléctrico con toda la impaciencia, tocamos el tiembre y sale el electrico con cara de puño y empezó a arreglar el carro, Listo problema eléctrico resuelto, vamos a ajustar la chispa y ya camino a la frontera con Chile a las 5 de la tarde. Perú, hasta aquí llegamos, lindo país, con playa, desierto, sierra, historias rondaran por todos tus alrededores, la historia de nuestra América está contada en tus calles, tus pueblos, tu gente. Extrañaremos la rica comida, “deliciosa”, la chicha morada, la cerveza cusqueña negra, el tacu tacu y el pescado a lo macho, creo que jamás encontraremos algo mejor, el dejo de la gente al hablar, la amabilidad y la sonrisa que emana felicidad, extrañaremos a las personas que conocimos, con quienes tuvimos el agrado y el placer de compartir, unas palabras, relatos, un poco de nuestras vidas, Gracias Perú por todas tus cosas bellas, eso si nunca extrañaremos las bocinas sonando por todo lugar, la bocina del taxi buscando pasajero, del mototaxi, de la moto, de la Kombi, del carro particular, el estrés de saber que debíamos conducir dentro de la zona urbana, del pesado trafico de las 4 de la tarde, la extrema precaución que hay que tener como peatón. Vamos conduciendo cada vez al sur, ya se ven los letreros que anuncian la llegada de la frontera, a unos 30 kms de Tacna esta el puesto fronterizo peruano, parqueamos la Kombi y vamos a sellar los pasaportes para salir, y nos piden un documento de relación de pasajeros y no la teníamos, nos dicen los agentes de inmigración que se debía conseguir en Tacna, mala noticia, pero nos dicen que nos venden uno ahí a 3 soles lo llenamos, lo revisa la policía, pone un sello, nos sellan el pasaporte y hacen otro sello a este documento y por ultimo sellan la salida del carro, con esto pasamos unos cuantos metros más y ya ingresamos a Chile, nos acomodamos tras la fila de autos para iniciar el proceso de ingreso a Chile.


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