18 de septiembre de 2012

Viaje en Ferry a Alaska - VW bus traveling around Americas


¿Cómo llegar a Alaska sin pasar por Canadá? Fue la pregunta que nos hicimos cuando nos negaron la visa a Canadá la primera vez, pero al final con visa en mano, decidimos continuar con la idea de ir en ferry.  La única empresa que hace este viaje con carros y pasajeros es la Alaska Marine Highway y aunque la opción no es más económica que pasar por tierra toda Canadá, es una inversión que vale la pena.
Después de un par de días con muchas enseñanzas en Bellinham en casa de los jóvenes esposos puertorriqueños Tifa y Carlos, hacemos las averiguaciones y podemos llegar desde esta ciudad a Haines (Alaska) pasando por fiordos, montañas, glaciares, faros y clar;, haciendo paradas en varias ciudades del camino para conocer un poco más.  Así que no compramos el pasaje directo sino de destino a destino.  Bellingham - Ketchikan -Petersburg - Juneau - Haines


Se paga el pasaje y el transporte del vehículo, pero el pasaje no incluye la cabina para dormir (y no se puede dormir en el carro) ni alimentación.


La mejor solución es llevar una bolsa de dormir o una carpa para armarla en el barco, no se debe olvidar llevar una buena cinta para pegar la carpa al suelo, el fuerte viento de la noche la va moviendo;  y cómo no si se quiere ahorrar algunos pesos hay que llevar la comida.


Después de dos noches a bordo llegamos a Ketchikan “capital mundial del salmón”. La infraestructura turística del centro está diseñada para los pasajeros de cruceros,  así que decidimos alejarnos hacia los parques nacionales a las afueras de la ciudad.
 Ésta es una región de bosques de grandes árboles, lunita prácticamente diminuta se ve al fondo.

Los salmones grandes viajeros de la vida, nadan desde el mar hacia el rio en contra de la corriente buscando el lugar donde nacieron para reproducirse.  Saltan y saltan a manera de cortejo y en algunos de esos saltos se salen del agua. Los que más navegan tienen parte de su  cuerpo fuera del agua.

Que arduo trabajo deben hacer, unos llegan, otros no, unos regresan, unos mueren, otros son atrapados por osos o pescados por la gente.

El clima durante el viaje un poco frio y con fuerte viento, pero el paisaje es impresionante y cambiante. Entre los fiordos se ven las ballenas, delfines y leones marinos. Las montañas se empiezan llenar de nieve y algunos glaciares se alcanzan a ver.

En una corta caminata se puede llegar así de cerca al Glaciar Mendenhall (Juneau, Capital de Alaska) y muy cerca de ahí  en entrada del parque nacional hay una plataforma desde donde se puede ver los osos pescando.

En esta ocasión fuimos muy afortunados había una madre con sus oseznos pescando y comiendo frutos de los arbustos.

Nunca imaginamos ver tantos glaciares, Alaska es el lugar donde están concentrados la mayor cantidad de glaciares del mundo y aunque a todos no se puede llegar fácilmente hay muchos que se observan con una corta caminata o al pasar por la carretera.

En el último recorrido en ferry desde Juneau a Haines, se despeja el firmamento y seguimos disfrutando de las lindas vistas del sur de Alaska.

Llegamos a tierra firme “Haines” y abandonamos el territorio de las islas, decidimos no continuar en ferry hasta Anchorage y cruzar casi 300 kilómetros de tierra canadiense para ingresar al norte de Alaska. A mediados de agosto y en pleno verano de Alaska sólo hay nieve en los picos de las montañas pero si hay viento y la temperatura oscila entre 10 y 20 grados así que pedimos todos los días al sol que salga a calentarnos un poquito.

Salimos de EEUU casi que pasando la frontera de corrido, no hay que sellar pasaporte ni entregar ningún documento. Al ingresar a Canadá la agente de inmigración nos pregunta hacia dónde vamos y si llevamos frutas o madera de estados unidos, sin hacernos bajar del carro revisa la visa y lleva a sellar los pasaportes a la oficina y nos los regresa y escuchamos el anhelado “BIENVENIDOS A CANADÁ”. Teníamos un poco de expectativa con esta frontera y muchos estadounidenses nos habían contado historias de que les hacían sacar todas las cosas de las casa-carro, al final se convertía en una gran misión cruzar hacia Canadá. Pero bueno, podemos decir que tuvimos una buena experiencia en la frontera y que salimos triunfantes.

Pasando sólo una noche en Canadá seguimos el camino y llegamos nuevamente a Alaska, donde encontramos el letrero donde todos los viajeros toman su foto  y dice “Welcome to Alaska”


10 de septiembre de 2012

Estados Unidos de America en kombi, de New York a Seattle - VW bus traveling around America


El tiempo pasa, es  largo, pero con tanto por recorrer se queda corto. Estados Unidos el país más extenso que hemos recorrido hasta ahora  y cada vez que ponemos los ojos en el mapa nos damos cuenta que estamos lejísimos de nuestro próximo destino, así que a planear mejor los recorridos y poner pie en el acelerador.
Este un recuento de lo que ha sucedido desde la salida de Washington D.C hasta  la llegada a Seattle, así que ya cruzamos éste país de oriente a occidente.


No pasó desapercibida nuestra lunita con sus placas de Colombia por Manhattan. Siempre nos preguntamos como se vería rodadando por las calles llenas de luces y letreros de la gran manzana. Así que nos dirigimos hacia el Timesquare, manos a la obra y este fue el resultado: Lunita pasando por sus calles, dando más colores y luces.



Nueva York, una de esas ciudades de las que nunca te quieres ir. Donde al voltear la mirada vez algo de admirar. Donde el inglés se habla con muchos acentos, donde al mirar al cielo te topas con algún rascacielos, donde se pasa del restaurante chino al italiano cruzando solo una calle. Donde cae el día y llega la noche con con igual o más resplendor. Una ciudad que nos enamoró.


Con nuestra Kombi andando muy bien vamos rumbo al norte, poniendo ¼ de aceite cada 400 millas– 640 km para recuperar lo que se está consumiendo y 10 galones de gasolina cada 220 millas – 350 kms. La bella región de los lagos nos regaló un clima perfecto en verano y los vientos frios del norte nos hicieron volver a cubrirnos.
Las cataratas del Niagara frontera de USA y Canadá, Un gran toque de naturaleza en medio de dos grandes ciudades. Siempre nos dijeron que se veían mejor desde Canadá, pero sin visa de Canadá fue imposible comprobarlo. Que interesante ver otro nuevo país al frente, ver que sólo lo separa un puente, pero que sensación incómoda saber que aunque está tan cerca no puedes entrar por que no tienes VISA!


Que fácil agarrar el sol y cómo nos decía un lugareño el lago Erie tiene unas de las más bellas puestas de sol que hayamos visto.


Continuando sentido occidente y bordeando los grandes lagos de los Estados Unidos, llegamos a Chicago, ciudad de rascacielos donde se encuentra el edificio más alto de el país “la torre SEARS” y que algún día fué el más alto de mundo.  Esa extraña fusión entre la gran metrópolis y el borde del lago Michigan una perfecta excusa para zambullirse en el agua y escapar del calor del verano, mientras los fuegos pirotécnicos por el día de la independencia retumban y todos admirados muestran orgullo por pertenecer a este país.


Un lugar con un estilo de vida diferente, el condado de Holmes en Ohio. Este lugar como en muchos otros en el centro norte del país, viven pequeñas comunidades de agricultores que usan vestimentas antiguas y tratan de no dejarse contaminar por formas de vida moderna, los Amish. Es curioso ver personas arando la tierra con sus vacas, cortando el pasto con artefactos mecánicos y transportándose con sus carruajes tirados por caballos entre las pequeñas carreteras de sus cultivos.


En Dakota del Sur un raro paisaje que se ha moldeado tras millones de años de erosión, el Badlands national park uno de esos lugares con el que uno se puede imaginar estar en la luna o en otro planeta. Éste un lugar de paso obligado para llegar al monte Rushmore, una de las emblemáticas esculturas estadounidenses en la que están esculpida la cara de cuatro presidentes de los Estados Unidos: Washington, Jefferson, Lincoln y Theodore Roosevelt.  



Entre los bellos paisajes cruzamos las montañas rocosas, nuevamente empezamos con paciencia y lentitud a recorrer la carretera. Llegamos al Yellowstone Park y la noticia que recibimos era de que no había cupo para acampar, pero ya otros viajeros nos habían comentado que se podía acampar pasando desapercibido en el parqueo de los hoteles.  A más de 2000 metros sobre el nivel del mar, el verano desapareció y nuevamente a buscar entre la Kombi con que abrigarnos. Entre los animales que atraviesan las vías para tomar agua entre los lagos que reflejan el firmamento, entre ríos cristalinos, aguas termales y géiseres,entendemos por qué es el parque más visitado de USA.


pasamos cinco días recorriendo las carreteras curveadas y empinadas del gran parque nacional Yellowstone, donde por segunda vez en este país nos detiene la policía de tránsito y en esta ocasión nada más y nada menos por que “VAMOS MUY DESPACIO”.


Llegamos a Seattle y nuevamente regresamos a la gran ciudad, con sus ires y venires, su tráfico ,sus grandes mercaderías y los turistas de los cruceros que nunca faltan  y completamos el cruce de Estados Unidos de oriente a occidente. Al llegar a esta ciudad pensábamos tramitar la visa de Canadá y vaya sorpresa nos llevamos cuando en la puerta del consulado había un aviso que decía que no atendían personalmente desde hace 1 mes! Todo lo hacen por medio de correo y nosotros no teníamos mucho tiempo para esperar la respuesta. Así que verificando el consulado más cercano y haciendo un gran esfuerzo, nos dirigimos a los Ángeles en un viaje de última hora, donde afortunadamente pudimos hablar en nuestro poco inglés con la cónsul y explicarle los pormenores de nuestra travesía. Así que con la visa de Canadá aprobada ¡ahí vamos!
Cuando pasamos por cosas como esta, nuestros sentimientos se ponen a prueba y como muchas veces lo hemos hecho, renace esa charla a cerca de las fronteras imaginarias que sólo vemos y ponemos los humanos, el hecho de ser latinos y mucho más ser colombianos, nos cierra la puerta de muchas fronteras, es bastante desconcertante!!!  A veces pensamos y ahora  hacia donde podremos seguir viajando con nuestro pasaporte colombiano? no tenemos muchas opciones. . .